Mucha novedad musical no hay en este disco. Caso contrario a las letras donde está la diferencia.
A mediados del mes de junio Muse publicó “Drones”, su séptima y esperada nueva placa discográfica. Esperada por que “The Second Law” (2012), superó todas las expectativas posibles, con lo cual era difícil -y lo fue- superarla.
No es un disco malo, todo lo contrario. Lo que pasa es que recetas, pruebas y riesgos, como los que mostró “The Second Law”, no son tan evidentes en este nuevo disco. Y esto no es malo, porque “Drones” regresa a lo básico del rock sin abusar de pistas o samples.
Musicalmente, sorprenden positivamente temas como “Psycho”, “Reapers” y “Defector”, que sin duda serán de las mejores piezas en vivo que mostrará la gira de “Drones”.
“Psycho”, es un blues fuerte y contundente, con guitarras metaleras y una batería muy, pero muy, agresiva. Otro tema sobresaliente es “Reapers”, que arriesga con un buen solo de guitarra como intro, refrescante cuando las estrellas mainstream han dejado ese recurso a un lado. También está “Defector”, en el que la conformación del power trío básico resalta orgánicamente, como debe ser.
Los temas OK, las letras el plato fuerte
Es ahí donde Muse demuestra que el rock sigue siendo contestatario. No es fácil que los sonidos mainstream le apunten a abrirle la cabeza a sus audiencias y remover un poco eso que ha estado allí aletargado por los medios y las marcas:
“Este año inició una discusión o debate referente a la autonomía que podrían tener los drones en enfrentamientos bélicos: si debían o no tomar sus propias decisiones de matar gente”, comentó Matt Bellamy en la presentación de “Drones” en Estados Unidos. “Ese es un avance aterrador en la tecnología. Me hizo pensar muchas cosas que se podían utilizar metafóricamente. Empecé a reflexionar sobre el comportamiento psicópata, en lo que hace a las personas ser capaces de matar, sin entender las consecuencias. Pensé en el lavado de cerebro, el extremismo religioso, el ejército con jóvenes que de alguna manera también pueden ser convertidos en drones”.
Allí está el eje central y temático de “Drones”, que se manifiesta durante todas las letras de este disco conceptual, que entrelaza sus canciones con dos intros (uno de ellos, el fragmento de un discurso de John F. Kennedy), y que termina con Drones, en una suerte de canto gregoriano, dando una clara referencia a óperas como The Wall de Pink Floyd.
Muse en Bogotá
El power trío británico regresa a Bogotá el próximo 27 de octubre en el parque deportivo 222. Las entradas se consiguen desde los $160.000 hasta los $319.000.
Calificación Mtres 4.0
Julián López Cortés